La relación entre los trabajadores autónomos y la Agencia Tributaria en España ha alcanzado un punto crítico, marcado por un creciente descontento y una sensación de persecución fiscal. La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) ha denunciado la presión fiscal que sufren los pequeños negocios y profesionales por cuenta propia, a quienes considera como «el chivo expiatorio de las deficiencias del sistema». Este artículo explora las preocupaciones de los autónomos y las implicaciones de la actual política fiscal en su actividad económica.
La UPTA ha emitido un comunicado en el que critica la «deriva fiscal» de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT), que ha intensificado los controles sobre deducciones comunes como el uso del vehículo, la manutención y el trabajo desde el hogar. Eduardo Abad, presidente de UPTA, ha expresado su preocupación por la creciente desconfianza hacia los autónomos, afirmando que «nos están cuestionando gastos que durante años se han considerado perfectamente legales».
### La Gota que Colmó el Vaso: Cambios en las Deducciones
Uno de los cambios más controvertidos ha sido la reducción del porcentaje de deducciones por gastos de difícil justificación, que ha pasado del 7% al 5%. Esta medida ha sido implementada sin una explicación técnica clara y afecta a miles de pequeños contribuyentes. Abad ha criticado que «se persigue a quien menos medios tiene y se deja intactos a quienes más capacidad tienen de eludir sus responsabilidades». Esta situación ha llevado a UPTA a romper formalmente con la mesa de trabajo que mantenía con la AEAT, argumentando que no se pueden avalar espacios de diálogo donde no se cumplen los acuerdos.
Entre los compromisos pendientes se encuentran la implementación de la facturación digital y la simplificación de los criterios fiscales en sectores específicos, cuestiones que UPTA considera esenciales para aliviar la carga administrativa del colectivo. La ruptura con la AEAT refleja un clima de desconfianza y frustración que se ha ido acumulando en los últimos años.
### La Importancia del Colectivo Autónomo en la Economía Española
El colectivo de autónomos representa más del 16% de la población ocupada en España, con más de 3,4 millones de trabajadores por cuenta propia registrados en mayo de 2025. Este grupo es fundamental para el mantenimiento del 99,2% del tejido empresarial, que está compuesto mayoritariamente por microempresas y pequeños negocios. Sin embargo, los autónomos sienten que están siendo tratados como sospechosos por defecto, lo que genera un ambiente de inseguridad y desconfianza.
La crítica de UPTA no es un caso aislado. Otras organizaciones, como la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), también han expresado su preocupación por el aumento de la presión fiscal y la inseguridad jurídica que enfrentan muchos autónomos al justificar sus deducciones ante Hacienda. La digitalización del control tributario y el uso intensivo de big data por parte de la AEAT han llevado a que muchos profesionales vean su relación con Hacienda más como una amenaza que como una colaboración.
El malestar del colectivo no solo refleja un problema coyuntural, sino que también plantea una advertencia sobre el futuro del trabajo autónomo en el país. Si la fiscalidad no se adapta a la realidad de los autónomos, podría producirse una fuga progresiva de talento y emprendimiento, algo que ya se está reflejando en las altas y bajas del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA).
### La Necesidad de un Cambio en el Modelo Fiscal
La situación actual plantea la necesidad de un cambio en el modelo fiscal que permita a los autónomos operar en un entorno más justo y equitativo. La presión fiscal desproporcionada sobre los pequeños contribuyentes no solo afecta su viabilidad económica, sino que también pone en riesgo la estabilidad del tejido empresarial en su conjunto. La falta de medidas que protejan a los autónomos y que promuevan un entorno de confianza y colaboración con la AEAT podría tener consecuencias graves para la economía española en el futuro.
Los autónomos han alzado la voz para exigir un trato más justo y equitativo por parte de la administración tributaria. La necesidad de un diálogo constructivo y de la implementación de políticas fiscales que reconozcan la importancia de este colectivo es más urgente que nunca. La situación actual no solo afecta a los autónomos, sino que también repercute en la economía en su conjunto, ya que su éxito es fundamental para el crecimiento y la estabilidad económica del país.
