La popularidad de Isabel Preysler ha trascendido generaciones, y su reciente aparición en el programa ‘El Hormiguero’ ha capturado la atención del público una vez más. En esta ocasión, la icónica figura de la sociedad española presentó su libro de memorias titulado ‘Mi verdadera historia’, donde comparte anécdotas y reflexiones sobre su vida, desde su infancia en Filipinas hasta sus relaciones más significativas. La conversación con Pablo Motos no solo se centró en su trayectoria, sino que también incluyó momentos entrañables y reveladores sobre su familia, especialmente su relación con su hija, Tamara Falcó.
### Un Viaje a Través de la Vida de Isabel Preysler
Isabel Preysler, conocida por su elegancia y carisma, ha sido un referente en el mundo del espectáculo y la cultura en España. Durante su visita a ‘El Hormiguero’, la madre de Tamara Falcó compartió que su motivación para escribir sus memorias fue el deseo de que sus nietos conocieran la verdadera historia de su abuela. «Quería que mis nietos tuvieran la verdadera historia de su abuela», confesó, destacando la importancia de la herencia familiar y la transmisión de experiencias.
El libro abarca diversos aspectos de su vida, incluyendo su infancia en Filipinas, la razón por la que sus padres decidieron enviarla a España y los grandes amores que han marcado su trayectoria. Isabel reveló que, a pesar de haber pasado por relaciones complicadas, se siente en un momento de felicidad y tranquilidad. «Es ahora, sin pareja, cuando me siento más feliz y tranquila», afirmó, lo que refleja una evolución personal significativa.
### Anécdotas Familiares y el Humor de Tamara Falcó
Uno de los momentos más destacados de la entrevista fue cuando Isabel Preysler compartió una anécdota divertida sobre su relación con Mario Vargas Llosa, que involucra a su hija Tamara. Durante una comida familiar, Tamara se acercó al escritor y le preguntó directamente si estaba casado, lo que provocó una reacción inesperada en Vargas Llosa. Isabel relató que el escritor le confesó que esa pregunta le había hecho «pasar un mal rato». Sin embargo, Tamara, con su característico sentido del humor, aclaró que su pregunta fue aún más directa: «Le pregunté directamente por su mujer. ‘¡Hombre Mario, qué gusto verte por tercera vez, ¿qué tal está tu mujer?». Esta anécdota no solo muestra la cercanía entre madre e hija, sino también el carácter espontáneo y divertido de Tamara, quien se ha convertido en una figura mediática por derecho propio.
Isabel también aprovechó la ocasión para expresar su orgullo por su hija, describiéndola como «maravillosa» y llena de vida. «Si no existiese, habría que inventarla», dijo, resaltando la admiración que siente por su capacidad para resolver problemas y su claridad de pensamiento. Este tipo de interacciones familiares no solo humanizan a las figuras públicas, sino que también permiten a los espectadores conectar con ellas en un nivel más personal.
La conversación también tocó el tema del perdón, un valor que Isabel ha aprendido a valorar más con el tiempo. Habló sobre cómo su hija Tamara le ha enseñado la importancia de perdonar, incluso a aquellos que han causado dolor. «Ella da mucha importancia al perdón. Quiso inculcarme a mí el perdón también, y yo he llegado a querer a Íñigo Onieva muchísimo, a través de ella», compartió Isabel, mostrando una faceta más vulnerable y reflexiva de su personalidad.
La aparición de Isabel Preysler en ‘El Hormiguero’ no solo fue un momento de entretenimiento, sino también una oportunidad para explorar temas profundos como la familia, el amor y el perdón. Su capacidad para compartir anécdotas personales con humor y sinceridad ha resonado con el público, reafirmando su estatus como una de las figuras más queridas de la sociedad española. La combinación de su historia personal y su relación con su hija Tamara Falcó ofrece una mirada única a la vida de una mujer que ha navegado por las complejidades del amor y la familia con gracia y dignidad.

