Una serie de incendios forestales ha arrasado las afueras de Jerusalén, interrumpiendo las celebraciones del Día de la Independencia de Israel. Este evento, que se conmemora anualmente, se ha visto empañado por la devastación provocada por las llamas, que han llevado a la evacuación de miles de personas y a la cancelación de actos tradicionales. Según el jefe de los bomberos de la ciudad, Shmulik Friedman, el incendio podría ser «el mayor que jamás haya habido en el país». Las autoridades han declarado que los equipos de emergencia están «lejos de controlar» la situación, lo que ha generado una gran preocupación entre los residentes de las áreas afectadas.
Los incendios comenzaron en la región de Sefelá, donde se han quemado aproximadamente 12.000 dunams, equivalentes a unas 1.200 hectáreas. Este siniestro ha superado a otro incendio que tuvo lugar la semana anterior, que arrasó cerca de 10.000 dunams en un solo día. Las llamas han consumido casi por completo el Parque Canadá y el bosque de Eshtaol, así como otras áreas cercanas. La Policía israelí ha informado que se han evacuado a los residentes de varias localidades, incluyendo Mishmar Ayalon, Nachshon y Elad, entre otras.
La situación se ha vuelto crítica, con la autopista que conecta Jerusalén y Tel Aviv cerrada debido al riesgo que representan las llamas. Los vientos intensos, que alcanzan ráfagas de hasta 90 kilómetros por hora, han complicado aún más las labores de extinción. En medio de este caos, los ciudadanos han comenzado a colaborar en las tareas de contención del fuego. Un residente de Nof Ayalon, Ronen Baolo, ha estado trabajando en la creación de cortafuegos con su tractor, ayudando a prevenir que el incendio se propague hacia su comunidad.
### Respuesta Internacional y Ayuda Aérea
Ante la magnitud del desastre, el gobierno israelí ha solicitado asistencia internacional. En respuesta, España ha decidido enviar dos aviones de extinción de incendios, mientras que Francia ha ofrecido un tercer avión. Esta colaboración internacional es crucial, ya que las Fuerzas de Defensa de Israel se han unido a los bomberos y otros servicios de emergencia en un esfuerzo por controlar el fuego. Además, otros países como Italia y Croacia también han ofrecido apoyo, enviando aeronaves para ayudar en las labores de extinción.
El Ministerio de Exteriores israelí ha confirmado que varios países, incluyendo Rumanía, Croacia e Italia, se han comprometido a enviar aviones y helicópteros para combatir el incendio. Esta respuesta rápida es vital, ya que el fuego continúa avanzando y amenazando a más comunidades. Las autoridades han instado a la población a mantenerse alerta y seguir las instrucciones de evacuación, mientras los equipos de emergencia trabajan incansablemente para controlar la situación.
La situación en Jerusalén es un recordatorio de los desafíos que enfrentan muchas regiones del mundo en términos de desastres naturales. Los incendios forestales, exacerbados por condiciones climáticas extremas, son cada vez más comunes y requieren una respuesta coordinada y efectiva. La colaboración entre países en momentos de crisis es esencial para mitigar el impacto de estos desastres y proteger a las comunidades afectadas.
A medida que las llamas continúan arrasando la región, la esperanza es que la llegada de refuerzos aéreos y el esfuerzo conjunto de los equipos de emergencia logren controlar el incendio y minimizar los daños. La comunidad internacional observa con atención, esperando que la situación se estabilice y que los residentes puedan regresar a sus hogares de manera segura.