La reciente muerte del papa Francisco ha dejado un vacío en la política española, que se ha visto intensificado por la falta de actividad en el Congreso. Sin embargo, este aparente letargo se ha visto interrumpido por una serie de tensiones y victorias políticas que han marcado la agenda del Gobierno de coalición entre el PSOE y Sumar. En este contexto, la gestión de Pedro Sánchez y Yolanda Díaz ha sido puesta a prueba, revelando tanto las debilidades como las fortalezas de la coalición.
### La Crisis del Gasto Militar y la Respuesta de Sumar
Uno de los episodios más destacados de esta semana ha sido el escándalo relacionado con un plan de aumento del gasto militar que generó un fuerte rechazo dentro de la coalición. La propuesta de un gasto de 10.471 millones de euros en defensa, impulsada por el PSOE, fue recibida con críticas por parte de Sumar, que se opone a la militarización del Gobierno. La situación se complicó aún más con la revelación de un contrato del Ministerio del Interior para la compra de munición a empresas israelíes, lo que provocó una crisis interna en el Gobierno.
La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, no tardó en reaccionar. Tras enterarse de la compra de más de 15 millones de balas, Díaz exigió la cancelación del contrato, argumentando que la decisión era incompatible con los valores progresistas que representa Sumar. La presión ejercida por Díaz y su equipo resultó efectiva, ya que Pedro Sánchez finalmente desautorizó al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y ordenó la cancelación del polémico contrato. Esta victoria para Sumar no solo reafirma su posición dentro del Gobierno, sino que también subraya la importancia de mantener una coalición progresista en tiempos de crisis.
### La Lucha por el Salario Mínimo y la Reducción de la Jornada Laboral
Otro tema candente en la agenda política ha sido la lucha por el salario mínimo interprofesional (SMI) y la reducción de la jornada laboral. En este sentido, Yolanda Díaz ha logrado imponer su criterio en varias ocasiones, enfrentándose a la resistencia del Ministerio de Economía. La reciente aprobación de la reducción de la jornada laboral es un claro ejemplo de cómo Sumar ha conseguido avanzar en sus propuestas a pesar de las tensiones internas.
La batalla por el SMI también ha sido intensa. A pesar de que el Ministerio de Hacienda había anunciado que los trabajadores que perciben el SMI tendrían que pagar IRPF, la presión de Sumar llevó a Moncloa a revertir esta decisión, eximiendo a estos trabajadores de impuestos. Este tipo de victorias ha permitido a Sumar consolidar su imagen como un actor político relevante, capaz de influir en las decisiones del Gobierno y defender los intereses de los trabajadores.
### La Estrategia de Sumar y el Futuro de la Coalición
A pesar de las victorias, la situación dentro de Sumar no es sencilla. La coalición ha enfrentado desafíos significativos, incluyendo la escisión de Podemos y la disminución de su apoyo en las encuestas. Sin embargo, la reciente reestructuración de Sumar, que ha pasado a ser un partido más cohesionado y menos hegemónico, ha permitido una mejor comunicación y colaboración entre sus miembros.
Las reuniones periódicas entre los líderes de Sumar y otros partidos de izquierda han sido clave para mantener un diálogo abierto y resolver diferencias estratégicas. Sin embargo, las tensiones persisten, especialmente con Izquierda Unida, que ha adoptado un tono más crítico en sus demandas. Esta dinámica sugiere que, aunque Sumar ha logrado algunas victorias, la cohesión interna sigue siendo un desafío.
En este contexto, la relación entre el PSOE y Sumar se ha vuelto más compleja. Mientras que el PSOE busca mantener su agenda de defensa y seguridad, Sumar se esfuerza por reafirmar su compromiso con los valores progresistas y la justicia social. La capacidad de ambos partidos para encontrar un terreno común será crucial para la estabilidad del Gobierno de coalición en el futuro.
La reciente crisis ha puesto de manifiesto tanto las debilidades como las fortalezas de la coalición. A medida que se acercan las elecciones, la capacidad de Sumar para consolidar su base y mantener su influencia en el Gobierno será fundamental. La lucha por el salario mínimo, la reducción de la jornada laboral y la oposición al gasto militar son solo algunos de los temas que definirán el futuro de esta coalición y su impacto en la política española.