La décima edición de MasterChef Celebrity ha dejado a los espectadores con el corazón en un puño tras una prueba de eliminación que se convirtió en un verdadero drama emocional. En esta entrega, los concursantes no solo se enfrentaron a los retos culinarios, sino que también tuvieron que lidiar con sus propias vulnerabilidades y la presión de un programa que puede cambiar sus carreras para siempre. La tensión aumentó cuando los concursantes se dieron cuenta de que el tiempo no solo es un factor en la cocina, sino también un reflejo de sus ansias por permanecer en el show.
### Un Comienzo Difícil: La Prueba de Eliminación
La primera prueba de la noche fue un verdadero desafío. Los aspirantes se encontraron con que todos los electrodomésticos estaban fuera de servicio, lo que les obligó a ser creativos y a utilizar únicamente una freidora de aire para preparar sus platos. Además, debían incorporar una piña de mar, un ingrediente que no es común en la cocina diaria. Esta situación llevó a que algunos concursantes, como Valeria Vegas y Masi, no lograran presentar un plato aceptable, mientras que otros, como Miguel Torres y Torito, se destacaron y recibieron los elogios de los jueces.
La presión aumentó en la prueba de exteriores, donde los concursantes se trasladaron a Trujillo, en la provincia de Cáceres. Divididos en dos equipos, tuvieron que elaborar un menú de cuatro platos para 100 invitados, bajo la supervisión del chef Toño Pérez, un reconocido embajador de la gastronomía extremeña. Sin embargo, la dinámica del equipo se tornó caótica cuando Torito comenzó a jugar con el cabello de sus compañeros, lo que generó tensiones y un enfado notable en Mariló. A pesar de los conflictos, los equipos lograron presentar sus platos, y el equipo azul, liderado por Miguel, fue declarado ganador.
### La Prueba de Eliminación: Un Giro Dramático
La verdadera sorpresa llegó en la prueba de eliminación, donde los concursantes se enfrentaron a un formato innovador que incluía el uso de una tablet y la ayuda de la Inteligencia Artificial. Cada concursante eligió hasta diez ingredientes y recibió una foto de un plato que debían recrear, pero con la condición de que la receta debía ser inventada por ellos. Este giro inesperado generó una gran tensión, ya que el primero en terminar podría tocar una campana y obtener una ventaja para la próxima semana.
Jorge, uno de los concursantes, sorprendió a todos al ser el primero en completar su plato en solo 20 minutos, lo que dejó a sus compañeros en una situación complicada, ya que muchos apenas habían comenzado. La reacción de los demás fue de incredulidad y frustración, y las palabras «¡Qué mal compañero!» resonaron en la cocina. Sin embargo, el plato de Jorge resultó ser un fracaso, lo que llevó a los jueces a lamentar que, a pesar de haber terminado primero, su presentación no cumplió con los estándares esperados.
La prueba se tornó aún más emotiva cuando Torito, visiblemente afectado, compartió su historia personal y la presión que siente por mantener a su familia. Su sinceridad tocó el corazón de sus compañeros, y Soraya Arnelas, otra concursante, no pudo contener las lágrimas al empatizar con su situación. A pesar de que el plato de Torito fue bien recibido, el de Soraya no convenció a los jueces, lo que llevó a su eliminación. La despedida fue emotiva, con Soraya agradeciendo la oportunidad y recordando sus inicios en el mundo de la música.
La combinación de desafíos culinarios y la carga emocional que los concursantes llevaron a la cocina hizo de esta entrega de MasterChef Celebrity 10 una de las más memorables. La lucha por permanecer en el programa no solo es una batalla por la cocina, sino también una lucha por sus sueños y aspiraciones. Los espectadores no solo son testigos de la competencia, sino también de las historias humanas que se entrelazan en cada plato presentado. La próxima semana promete más sorpresas y emociones, mientras los concursantes continúan su viaje en este emocionante reality show.
